miércoles, 7 de marzo de 2007

Cuidado, que nos quedamos atrás

Si hay algo que no conocíamos hasta ahora era el intersante dato de que en España somos uno de los países que más utilizamos el teléfono móvil. Y desde este punto de vista, es muy lógico que en nuestro tópico de latin lovers y vocación auténticamente mediterránea, nos guste hablar y hablar... y nada más que hablar.
En primer lugar hemos comprobado cómo no somos tan adictos a Internet como pensábamos, pues todavía existen individuos de otras zonas en este planeta que se pasan más horas en Internet. Son los nórdicos. Según las estadísticas de Telefónica y eEspaña 2006, los españoles estamos por debajo de la media europea (apróximadamente un 39%) según el informe de la fundación auna que se puede encontrar en el siguiente enlace www.francetelecom.es/fundacion.
Sin embargo, parece un tanto paradójico que haya países como Italia que alcancen el 100%, porque es complicado imaginar a todo el mundo con un teléfono móvil. España debe estar rondando estas cifras pero no es tan difícil encontrar a una persona que todavía no haya adquirido este dispositivo: mi madre, por ejemplo. Por lo tanto, las cifras tendrán un valor más representativo.
Pero hablemos de Internet, que es el fenómeno que nos ocupa. Es un método importantísimo de comunicación que continúa evolucionando favorablemente y que en España también ha causado una drástica evolución en los modos de vida, en especial, si hacemos mención a lo que hemos visto hoy en clase: LAS REDES SOCIALES.
Este concepto que a todos nos parece un instrumento de estudio de la sociología también es un fenómeno que ha destacado por el auge y la aceptación que día a día reciben; para esto estan las estadísticas. El servicio de social networkin son ess redes que se trabajan en España que incorporaron un componente tecnológico que las ha convertido en redes sociotécnicas. Vamos, que del teléfono y el correo postal que tan cómodo e innovador nos parecía hemos llegado a mandar e-mails por un tuvo; y ya ni eso, con el messenger es que sólo tenemos que dar un toque a alguien para que lo interprete y se conecte para poder hablar. Digamos que tanto el teléfono móvil como la red de redes se complementan así mismos, cosa que no verán con buenos ojos las compañías telefónicas.
Pongamos por ejemplo ésta plataforma: los blog´s. Estos elementos que todavía no son conocidos por todos como el conocido messenger en sus variantes (msn, yahoo, icq, yamessenger, etc.), sirven y ayudan a difundir una opinión individual para que los usuarios la lean, la interpreten, la cuestionen. Ahora sí que todo es relativo.
En definitiva, podemos comprobar que en España también nos estamos adaptando a las nuevas tecnologías, no sólo el Internet que si hace algunos años todavía tratábamos de no hacer mucho ruido con aquel sonido del módem que funcionaba por líneas telefónicas, a inmediatamente acceder a todo lo que necesitábamos. Si tratásemos de acceder de la forma más rudimentaria a Internet acabaríamos estresados de la lentitud con la que tarda en descargarse un enlace web. Ahora todo aquello parece lejano, pero hace poco menos de cinco años.
Pero es que la tecnología móvil también es meteórica. Si vemos una película de la época del 2000, fliparíamos con los teléfonos que utilizaban. Recordemos aquel Alcatel, modelo atractivo, adaptado a los jóvenes que se salía de la palma de la mano. Hace tres años llamábamos "ladrillo" a ese invento pero es que hoy también llamamos así a nuestro primer móvil, cuando ya habíamos utilizado ese término. Sencillame Increíble.
Esta carrera meteórica está cada vez más cerca de superarnos. Todavía hay muchos que no conocen un Mp3, y para otros ya se ha quedado obsoleto por la llegada del Mp4 y así sucesivamente. Cuidado que con poco nos vamos a quedar atrás, convirtiéndonos en ladrillos anticuados.
Pues sí, hay algo que no conoces.